Cómo elegir un corredor de bolsa

Economía y Negocios Online

¿Quiere invertir en la bolsa? Si usted está interesado en hacerlo, debe empezar por tomar una decisión fundamental. ¿Con qué corredor quiero trabajar?

Esto, porque para cualquier inversionista, la correcta elección de su agente bursátil es tan importante como la inversión misma. Y si bien, se trata de una decisión compleja, hay ciertos parámetros que permiten entregar una orientación sobre el tema.

Primero que todo, es relevante saber qué hace un corredor de bolsa. Este, una vez que usted ya ha contratado sus servicios, es el encargado de ejecutar sus órdenes en la rueda de la bolsa. Pero, además, le envía información y le entrega recomendaciones sobre en qué invertir y en qué sectores poner atención. Además, están pendientes de toda la información económica disponible en los medios de prensa, por lo tanto, pueden, velozmente, vislumbrar si alguna de estas noticias puede cambiar la cotización de las acciones de una o más compañías en particular.

Departamento de Estudios

Este punto es uno de los primeros a los que debe poner ojo. Todas las recomendaciones de las que le hablábamos provienen del departamento de Estudios de la corredora, que es el encargado de realizar toda la orientación sobre la selección de los instrumentos para nuestra cartera de inversión. Este punto es fundamental: Si usted quiere operar con un agente bursátil, pregunte primero cómo es este departamento, quiénes lo componen y cuál es su antigüedad. Normalmente, un buen departamento de Estudios comete pocos errores en sus recomendaciones y, si las sigue, puede hacer importantes ganancias.

Calidad de las recomendaciones

¿Estamos recibiendo el análisis detallado de las noticias y su efecto en el valor de las acciones cuando aparecen en la prensa? ¿Están las recomendaciones ajustadas a nuestro plazo de inversión? ¿Recibimos de manera oportuna los cambios de la recomendación de los títulos? Toda esta información que el corredor nos hace llegar, es sumamente importante y, en términos de rentabilidad, pueden marcar la diferencia. Si es “tarde” cuando nos envían la recomendación de “vender” algún título, de seguro estará disconforme. Toda esta información debe ser evaluada periódicamente.

Comisiones

Este es otro aspecto fundamental. Una comisión alta implica que, cada vez que compre una acción, deberá esperar para deshacerse de ella que suba, al menos, por sobre esa comisión.

Actualmente, la comisión, fuera de los cobros de IVA y de Derecho a Bolsa, están en un rango de hasta 0,5%. De ahí para arriba, se puede decir que el servicio es caro, aunque a veces es mejor pagar un poco más por un servicio de asesoría de mejor nivel.

Pero una comisión alta puede influir en sus ganancias y Por ejemplo, si la comisión por cualquier operación de compra o venta de acciones es del 0,5% y usted compra un papel, deberá esperar que éste suba, a lo menos, por sobre ese 0,5% (a lo que debe sumar el IVA y el derecho de bolsa) para recién, por sobre esa cifra, calcular su real ganancia.

No hay ningún inconveniente en que usted pregunte cuál es el esquema de comisiones que cobra un correedor, como también los valores.

Hay algunos agentes bursátiles que cobran un monto fijo, lo que está relacionado con la cantidad y los montos de las operaciones que haga en el mercado. También está la modalidad de cobro variable, en que el agente bursátil cobra un determinado porcentaje dependiendo del monto transado, cuyo techo de mercado se ubica entre 0,4 y 0,5%, por cada operación de compra de acciones.

Algunas corredoras que operan por internet, incluso tienen un costo fijo por cada movimiento de hasta un determinado monto, el que va desde los $10.000 por cada transacción.

Además hay otros cobros, como la custodia de títulos accionarios. Esto se cobra aparte, aunque tiene un valor marginal.

Por esto, evalúe bien cómo quiere operar en la bolsa, ya que para montos bajos, puede que una comisión variable sea una buena opción, pese a que ésta es menor mientras más altos son los montos transados en la rueda.

Ejecución de las órdenes

Si su corredor se tarda en hacer efectiva las órdenes de compra o de venta, y usted se queda con la sensación de que no logró aprovechar el momento preciso en que su transacción le hubiese reportado mejores dividendos, debe tener claro que las corredoras ejecutan estos mandatos por orden de recepción, sin importar ni el tamaño ni el tipo de inversionista.

Por eso, pregunte directamente cuánto tardan en ejecutar las órdenes, si es automático o no y hasta qué hora se recepcionan estas órdenes. Esta información puede ser de gran ayuda para usted, ya que en el momento de operar con un corredor, el concepto de oportunidad es sumamente relevante.